Seguramente muchos de nosotros hemos visto (y envidiado) las fotografías de amigos, familiares y conocidos que coronan la cima de impresionantes montañas y nevados luego de meses de esfuerzo y entrenamiento. Para disfrutar de los paisajes que vemos en estas imágenes no es necesario ser expertos, basta con investigar y planificar bien esta aventura tan enriquecedora. En Viajala les adelantamos un poco el trabajo.    

De norte a sur, Chile cuenta con un estimado de 2000 volcanes de los cuales unos 500 se encuentran activos. Esta tarea de escoger solo cinco y detallar las razones por las que deben ser visitados, es bastante subjetiva, pero seguramente después de conocerlas quedarán tan motivados que iniciarán su propia búsqueda.

Nevado Ojos del Salado

Ubicado en la provincia de Copiapó, entre la frontera con Argentina, este es el volcán más alto del mundo y el segundo pico más alto del hemisferio sur. Aunque su última erupción data de hace más de 1.000 años, en 1993 se registraron fumarolas y emisiones menores de ceniza, por lo que se sospecha que sigue activo. 

Lo más increíble es que su ascenso es relativamente fácil y basta con planificar bien el viaje. Dada la altura a la que se encuentra, todo el recorrido debe tomar por lo menos unos seis días para aclimatarse e ir subiendo a los diferentes puntos: la Laguna Verde, el refugio de la Universidad de Atacama y el Refugio Tejos, desde donde parte el ascenso. Los últimos metros antes de coronar son más complicados y es probable que se necesite de cuerdas, arneses y la ayuda de personal especializado (si usted no lo es). 
 
Afortunadamente, al ser parte del Norte Grande de Chile, está garantizado que en su recorrido disfrute de paisajes tan impresionantes, que la llegada a la cumbre será como la cereza del postre. Tome en cuenta que el clima es bastante seco y solo se registran nevadas en la cima y durante el invierno.  

Volcán San José de Maipo

Foto: Edgardo Duarte Jorquera
 
También ubicado en la frontera entre Chile y Argentina, el volcán San José de Maipo se encuentra a tan solo una hora de Santiago y es una escapada ideal para quienes viven o están de visita en la ciudad. Al ser parte de una cadena de picos nevados, su ascenso ofrece una vista privilegiada de la magnitud y conmovedora belleza de la cordillera de los Andes. El San José está activo pero estable y no representa riesgos para la población y sus visitantes.
 
Le recomendamos que coordine su visita con alguna agencia de turismo en Santiago. El recorrido le tomará unos ocho días, durante los cuales se realizan ascensos cortos y se preparan el cuerpo y la mente para la aventura que se está emprendiendo. Montañistas de todo el mundo llegan hasta esta montaña para practicar su ascenso al Aconcagua, así que durante sus ratos libres seguramente podrá compartir historias muy interesantes con sus compañeros. 
 
El quinto día se realiza el ataque a la cumbre y al llegar notará que no podrá alcanzar el punto más alto, llamado la Cumbre Internacional, que se encuentra del lago argentino. Su grupo habrá coronado la Cumbre Chilena que tiene una altura de más de 5.700mts. 

Volcán Villarrica

Este es uno de los volcanes más activos de América del Sur y uno de los más visitados de Chile. Se encuentra al sur, en el límite entre las regiones de Los Lagos y Araucanía, y su altura es relativamente baja ya que no llega a los 3.000mts. 
 
Si bien cualquier época del año es apta para ascender a la cumbre, en invierno hay que tener precaución de las bajas temperaturas y el aumento de nieve. Por lo demás, aliste su equipo de montaña, convoque a un grupo de aventureros y viaje hasta Pucón, desde donde salen numerosas excursiones. El trayecto en auto hasta las faldas del volcán toma una hora y el ascenso entre seis y siente, así que en tan solo un día habrá visto de cerca un cráter activo y otros volcanes como el Lanin y el Llaima, o los lagos Villarica y Calafquén, desde una nueva perspectiva. 
 
Aunque parezca fácil, siempre es importante tener un buen estado físico y una resistencia óptima para caminar en alturas; sobre todo si viene de las zonas bajas del país. Luego de la satisfacción que trae el haber coronado este hermoso volcán, viene uno de los momentos más divertidos del paseo: el descenso. Gracias a que casi no hay rocas u obstáculos que presenten peligro, los montañistas proceden a sentarse, estirar las piedras y deslizarse como en un juego de niños. 

Volcán Osorno

Rodeado de misterios y leyendas, este volcán se encuentra entre el límite del Parque Nacional Vicente Pérez Rosales y la Laguna Llanquihue, en la Patagonia chilena. Se encuentra inactivo y durante todo el año se pueden realizar deportes de invierno y ascensos a la cumbre, aunque en verano esta práctica queda reservada para los expertos que saben cómo sortear grietas y otros obstáculos.   
 
Si es de los que no se conforman con verlo desde abajo, su recorrido hasta la cumbre comenzará el día anterior en el Refugio Teski, en las faldas del volcán, donde pasará la noche con sus guías y compañeros de aventura. Existen muchas agencias experimentadas en Puerto Varas, Frutillar u otras localidades de la zona con quienes podrá realizar el ascenso, que en dificultad es similar a coronar el Villarica, aunque cerca de la meta se pone un poco más difícil.
 
El ataque a la cumbre comienza a las 5am y dura entre seis y siete horas. Una vez arriba, finalmente percibirá por qué esta imponente montaña ha sido el centro de mitos y adoraciones por parte de los mapuche. Además, agradecerá lo afortunado que ha sido al haber realizado este recorrido sin que Peripillán, un espíritu poderoso que está preso en las entrañas del volcán, haya descargado su furia contra los caminantes.
 
Este volcán es parte de una de nuestras rutas para viajar con amigos por Chile, ¡no se lo pierda!

Volcán Llaima 

Se encuentra al este de la ciudad de Temuco, en el Parque Nacional Conguilío, y es otro de los volcanes más activos de América del Sur, con un registro de más de 20 eventos mayores de volcanismo durante el siglo pasado. Y aunque con frecuencia se divisen humaredas en su cráter, son cientos los aventureros que llegan hasta la cumbre y superan el reto.  
 
El ascenso inicia en el centro de esquí Las Araucarias; puede organizar el viaje completo desde Temuco o hacerlo una vez que llegue a este punto. Llegar a la cumbre y regresar a su punto de partida le tomará entre seis y ocho horas, depende de su ritmo y nivel, y se puede hacer independientemente bajo su propio riesgo. Si es un montañista experimentado no tendrá problema en seguir el camino marcado, que es casi en línea recta. Eso sí, preste mucho atención a deslizamientos de rocas que son comunes en este lugar.     
 
Durante el camino y una vez en la cima podrá apreciar más de seis volcanes, y decenas de bosques y cuerpos de agua, típicos de esta zona llena de vida y diversidad. Una vez que haya descendido, además de tomarse su tiempo de descanso, puede continuar su paseo explorando los bosques que seguramente le mostraron su encanto mientras los veía desde las alturas.