Platos deliciosos, clima de verano, bebidas refrescantes, fuegos artificiales, cenas familiares, fiestas con amigos... ¡Con razón el fin de año es una de las épocas más entretenidas para los chilenos! 

Cualquier lugar del país es bueno para celebrar este fin de ciclo que comparten millones de personas alrededor del mundo, pero hay ciertos destinos que presentan un encanto especial. Así que toma nota y reserva ahora antes de que te quedes sin puesto...

1. Valparaíso - Viña del Mar

Aunque son dos ciudades distintas, parece que fueran la misma separada por una frontera invisible que la curva pronunciada de una montaña marca entre la modernidad y un puerto antiguo. 
 
Lo más divertido de venir a cualquiera de estas ciudades es que puedes disfrutar de dos estilos de celebración sin tener que viajar mucho, mientras los fuegos artificiales adornan el cielo desde las anchas playas del pacífico durante unos 20 minutos.
 
Porque ese es el plato fuerte que durante décadas viene atrayendo a miles de turistas nacionales a internacionales a Valparaíso y Viña del Mar: un verdadero espectáculo de luces y colores que puede disfrutarse desde la costa, las casas que se encuentran en los cerros, los restaurantes y bares que están en la orilla del mar o a bordo de yates y lanchas que ofrecen paquetes muy completos para esta fecha.
 
Después viene la celebración hasta altas horas de la mañana, con las calles llenas de alegría, abrazos, “copete”, música en vivo, baile… ¡la mejor manera de recibir el año nuevo!
 
Para llegar debes viajar a Santiago y desde allí tomar un bus a cualquiera de las dos ciudades.

2. Termas de Chillán

El otro lado de la moneda es esta opción para quienes ya han pasado todo el año inmersos en la ciudad, sus luces y ruidos, así que buscan naturaleza, calma y un merecido descanso. 
 
Aunque el paisaje más famoso de las termas de Chillán es el de piscinas que emiten vapor mientras están rodeadas de nieve, el verano también es una época ideal para visitarlas ya que permite realizar actividades de montaña en sus bosques milenarios.
 
Imagina un día de caminatas, picnic, rapel, bicicleta y/o paseos a caballo, que termine con un baño en aguas termales medicinales (gracias a la presencia de azufre y hierro). Además, la mayoría de hoteles organizan una noche especial de fiesta para la noche de fin de año que incluye cócteles y cena especial, orquesta, cotillón y baile toda la noche… como para que no pierdas la costumbre de celebrar a lo grande. 
 
Para llegar tendrás que viajar a Concepción y desde allí ir por tierra. 

3. La Serena

Esta ciudad costera es uno de los principales destinos de verano en Chile, así que también es uno de los lugares más animados durante las fiestas de fin de año. 
 
Siguiendo la tradición de fuegos artificiales que parecen duplicarse gracias a su reflejo en el agua de mar, La Serena se luce con unos 20 minutos de luces y estallidos que se verán desde la Av. Del Mar.
 
Aquí también se instala un escenario con música y humor, y la playa se viste de fiesta toda la noche hasta que llegan los primeros rayos de sol. La ciudad cuenta con una oferta turística muy variada, así que puedes buscar desde ya las opciones que mejor se ajusten a tu gusto y presupuesto; seguramente todas tienen paquetes especiales para estas fechas.
 
Recomendación: aprovecha para probar el cóctel “Serena libre”, una preparación original de pisco que se ha convertido en la favorita de muchos serenenses. 

4. Osorno

Este es el plan ideal para los exploradores de corazón, esos que aprovechan los días libres para cumplir retos con los que llevan soñando un tiempo, ¡cómo llegar hasta la cumbre de un volcán!
 
Porque además de los planes tradicionales de celebración completa (con cena, bebidas, orquesta, máscaras y pitos de colores), algunas agencias organizan una actividad especial durante la noche de fin de año: una escalada nocturna a volcán Osorno.
 
El ascenso inicia en la noche y la celebración de las 12 campanadas se da a una altura suficiente como para disfrutar de los fuegos artificiales que explotan en varias localidades de la región, mientras que las luces del primer día del año se reciben en la cumbre y luego se inicia el descenso. ¿Suena bien no? Si tienes alma aventurera seguramente tu mente ya está haciendo planes para vivir esta increíble experiencia. 

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5. Isla de Pascua

¿Has tenido un buen año? ¿Qué tal cerrarlo con un viaje a la polinesia donde todo es diferente, exótico y muy auténtico? Y si tu año no ha sido tan bueno, con más razón recibirlo en medio de tanta belleza. 
Foto: iMujer
 
En esta fecha el clima en Isla de Pascua es delicioso, con temperaturas cálidas y pocas lluvias que te permitirán disfrutar de playas de aguas turquesas, caminatas o paseos a caballo en las áreas donde se encuentra los Moáis, visitas a los volcanes y demás actividades turísticas.
 
La noche de fin de año aquí será más especial que en cualquier otro destino, porque la cena tendrá un menú diferente (basado en exquisitos frutos de mar), música polinesia que en este caso se acompaña por el movimiento cadencioso de bailarines Rapa Nui en sus trajes típicos y mucho menos ruido, ya que aquí no se realizan grandes espectáculos de fuegos artificiales sino que se enaltece la melodía de la naturaleza y su relación armónica con el ser humano.
 
Si quieres disfrutar de una celebración más auténtica, camina por el pueblo, visita los lugares públicos y tal vez tengas la suerte de ser invitado a un curanto comunitario. 
 
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