El sur de América alberga unos de los paisajes naturales más impresionantes del planeta. Montañas pobladas por elegantes bosques, lagos de aguas oscuras y cristalinas, imponentes picos nevados y glaciares milenarios, son algunas de las maravillas que se encuentran en esta región. El famosos Cruce de los Lagos, un recorrido que une a Chile y Argentina, es una de las mejores maneras para disfrutar de estos lugares.
También llamado Cruce Andino, se tiene datos de que este recorrido fue realizado por primera vez hace unos 100 años por el argentino Ricardo Roth, un explorador a quien se le debe gran parte del desarrollo turístico de la zona.
El paseo puede comenzar en Puerto Varas (Chile) o Bariloche (Argentina). Con el tiempo y el crecimiento de las principales ciudades involucradas, se ha convertido en uno de las actividades más anheladas por turistas de todo el mundo, ya que se realiza en diferentes medios de transporte y a través de diversos escenarios.
Si vas a planificar un viaje a Chile, debes reservar por lo menos una semana para disfrutar del Cruce y sus destinos. Para comenzar, tendrás que volar hasta Puerto Montt y tomar un bus por 15 minutos a Puerto Varas, una pequeña ciudad austral que se caracteriza por la arquitectura alemana que trajeron sus colonizadores a mediados del siglo XIX. Además de ser el punto de partida para el recorrido de los Lagos, cuenta con otros atractivos turísticos que merecen la visita. Uno de los más importantes es el Volcán Osorno, cuyo territorio es apto para la práctica de diversos deportes de aventura y el ascenso a la cumbre es relativamente fácil.
Una vez que hayas disfrutado de la ciudad y sus atractivos, es hora de comenzar tu anhelado camino por las indómitas tierras de la Patagonia. El circuito inicia con un viaje en bus de dos horas que rodea el Lago Llanquihue hasta llegar a Saltos del Petrohué.
Esta pequeña localidad es el punto de conexión donde los turistas disfrutan de un descanso y se preparan para el segundo tramo: el cruce del Lago de Todos los Santos durante hora y media hasta el pueblo de Peulla.
En este hermoso lugar, enclavado en el corazón de las montañas andinas y a medio camino de su destino, puedes tomar nuevamente un bus que en dos horas te lleva hasta la localidad fronteriza de Puerto Frías o pasar la noche en uno de sus dos acogedores hospedajes, donde disfrutarás con tranquilidad del paisaje y su biodiversidad.
Una vez en la frontera, se navega nuevamente hasta el pueblo argentino de Puerto Alegre a través del Lago Frías.
Cuando llegues a Argentina sabrás que falta poco tiempo para llegar a tu destino, así que los cambios de transporte le parecerán divertidos y emocionantes. Primero, un bus por 10 minutos hasta Puerto Blest, donde hay un par de atractivos muy interesantes como la cascada los Cántaros y el Centro de Interpretación de la Fauna y Flora de Parques Nacionales.
La mayoría de tours no incluyen estas visitas, pero si vas en un grupo grande puedes pedirlas a su agencia. Después se toma nuevamente una embarcación, la última del viaje, y se navega por una hora a través del Lago Nahuel Huapi hacia Puerto Pañuelo, desde donde parten los buses hacia su destino final: Bariloche.
Llegarás de noche y cansado del viaje, pero extasiado por la hermosura de los paisajes que han rodeado tus pasos. Los mejor que puedes hacer entonces, es ir a tu hospedaje, darte una ducha caliente y disfrutar de tu cena junto a la chimenea y con un buen vino argentino.
En esta ciudad, considerada como el segundo mejor destino de esquí a nivel mundial, seguirás viviendo emocionantes aventuras, así que debes aprovechar tus días al máximo.
Además de practicar deportes de invierno y visitar fascinantes sitios naturales, hay otros atractivos muy interesantes como la Catedral San Carlos de Bariloche, el Centro Cívico o el Museo de la Patagonia.
Cuando estés listo para dejar este paraíso de nieve, puedes continuar tu viaje por tierras argentina, o regresar a Chile para explorar más de sus diversos lugares turísticos. Probablemente no estés de ánimo para volver a hacer el recorrido por tierra y agua en un solo día, así que siempre puedes encontrar pasajes baratos con Viajala para su regreso.
La mejor época para realizar este paseo es durante las estaciones intermedias, entre septiembre – noviembre, marzo y mayo. Sin embargo, si quieres disfrutar de una verdadera fiesta patagónica, Bariloche celebra su Fiesta de la Nieve durante el solsticio de invierno, por lo que podrías iniciar aquí su viaje y hacer el Cruce de los Lagos desde Argentina hasta Chile.
De cualquier manera, si llevas la ropa adecuada y vas preparado, pocas cosas podrán opacar la maravillosa experiencia que ofrece este singular recorrido.